Durante un viaje, uno de los aspectos que más consume nuestro presupuesto es la comida, por ese motivo en Lovigo te daremos tres útiles consejos que podrás usar fácilmente para manejar mejor tu dinero en tu próximo viaje, sin dejar de disfrutar de la gastronomía, porque aceptémoslo, también es una de las grandes razones por las que viajamos.
Comida Corrida
Así es, ir a fonditas en los países o ciudades no sólo significa tener una comida completa de un costo bajo a razonable, también implica comer lo que normalmente comería un local de la ciudad que visitas. Por ejemplo, si viajas a la ciudad de Lima, Perú y encuentras un lugar donde sirven comida corrida, es muy probable que puedas probar como entrada la causa limeña, como plato fuerte un ají de pollo acompañado de arroz blanco y huevo cocido, de tomar agua fresca y unos picarones de postre.
Mercados
La comida no solamente es más fresca, sino que puede llegar a ser baratísima. En este punto también puedes incluir la comida callejera, pero no hay que abusar y comer en todos los carritos que veas por la calle, porque si no de nada servirá para ahorrar. Recuerda que de poquito en poquito se llega a gastos mayores. Tampoco preguntes por los mercados turísticos, en estos normalmente los precios serán más elevados, atrévete a ir a los mercados donde van los locales.
Hacer súper
¿Cuándo estás en tu casa sueles salir a comer todos los días? Por supuesto que no. Este tip funciona muchísimo sobre todo cuando tienes una cocina o cocineta en donde te estás hospedando y si te quedas por algunas semanas o más tiempo. Puede servirte para hacer unos sándwiches, cereal o algo que te sirva de snack para evitar los gastos hormiga y llevar tus refrigerios para el resto del día. Piensa en este consejo cuando vayas a excursiones, largas caminatas, etc.